viernes, 24 de marzo de 2006

Energía se busca

Muy rara vez sucede: estuve pensando.
¿En qué? Resulta que ayer, o antes de ayer, apareció una noticia sobre una nueva máquina de movimiento perpetuo, esta vez tan argentina como yo.

No, esperen, no se vayan. No estoy proponiendo que construyamos una máquina de este tipo. Pero convoco a quien tenga ganas a pensar, diseñar, crear e imaginar instrumentos que ayuden a producir energía.

Lo digo en serio. Cosas que ayuden a producir electricidad o movimiento a bajo costo, que puedan ser emplazadas en lugares alejados de nuestro tercer mundo, que se puedan transportar si es necesario. Y que no necesiten un esclavo dándole al pedal ni nada parecido. Sería interesante que no fueran dañinas para con el ambiente.

He visto mecanismos interesantes: "gusanos" y plataformas armados con toneles que producen energía al trasvasar y/o sacudir su contenido bajo el influjo de las olas; pequeñas norias flotantes, que en conjunto producirían una buena cantidad de energía; canaletas y tuberías para drenar el agua de las olas hacia pequeñas turbinas. Veo que la presencia del agua es muy fuerte (a mí siempre me impresionó la fuerza del agua), pero puede haber otras: ¿viento? ¿bacterias? ¿el calor de las ciudades? ¿las luz residual de las urbes? ¿qué hay de las larguísimas cintas de asfalto que recorren el mundo como venas?

Posiblemente esté pidiendo mucho, pero creo que puede ser un juego interesante.
Quién sabe, en una de esas...

jueves, 9 de marzo de 2006

Ciento sesenta con calzador

Después de 10 números vuelvo a sacar una nueva tapa para Axxón.

La misma fue recreada digitalmente a partir de una imagen muy parcial que tenía de hace más de quince años. Hacía ya bastante tiempo que la había escaneado, pero nunca quise usarla hasta tener una idea completa de lo que quería hacer.

Por suerte sucedió. Había empezado a pintar un paisaje simplemente para mantener "la mano entrenada". Tenía el fondo pintado "a mouse" (no sabía muy bien para qué hasta ese momento) cuando noté que el "profesor Locovich" (¿se acuerdan de los "autos locos"?) calzaba perfectamente en medio de la escena. Así que, manos a la obra, primero agregué las nubes (aprendí a pintarlas haciendo El Encarrilador), la luna y el sol. Allí tomé lo que tenía escaneado y lo calcé en medio de la escena.

Pero aún faltaba mucho.

Como el original fue hecho a mano alzada cuando dibujaba aún peor que ahora, hubo que hacerle muchos ajustes a la nave (la que a mí se me ocurre una mezcla entre sapo, pelícano y langosta). Una vez "mejorada" la misma comencé con lo retoques sobre el personaje, tratando de agregar luces y sombras a un dibujo originalmente plano, apenas pintado a lápiz (eso sí, el verde de la nave había sufrido un experimento con crayones y témpera muy aguada). Por último, y tras agregarle las hélices, pinté el 160 para asociar la imagen con el número de la revista. Los colores del numerito y su oblea se deben a la línea de colectivos del mismo número que circula por esta ciudad de Buenos Aires y una buena parte del sur del Gran Buenos Aires (provincia), yendo y viniendo de la Ciudad Universitaria a Claypole.

La tapa en cuestión
A mí el resultado final me agrada. ¿Y a vos?